.

lunes, 4 de agosto de 2014

El príncipe y el sufrimiento


El destino se empeña en hacerme sufrir, es cruel, fortuito y reincidente. Pensaba tristemente el príncipe Carlos porque estaba pasando por situaciones muy difíciles.

En busca de una solución decidió caminar por el bosque acompañado de su perro con la intención de pedirle al hombre sabio una pócima mágica para evitar el sufrimiento.

Pero en la oscuridad del bosque, un lobo los atacó y mordió a su perro dejándolo muy mal herido. El príncipe lloró una y otra vez viendo como éste moría en sus brazos sin poder hacer nada para evitarlo.

Pasadas unas horas decidió enterrarlo allí mismo y entre lágrimas siguió su camino guiado por unas luciérnagas que le alumbraban el paso con sus destellos de luz.

Muy de mañana logró subir a la montaña y al encontrar al hombre sabio meditando sentado sobre una roca le suplicó que le diera alguna pócima mágica para evitar el sufrimiento.

Ante tan complicada petición el hombre sabio le miró atentamente a los ojos y le dijo:

_ No existe ninguna pócima mágica para evitar el sufrimiento.

_ ¡Ayúdeme por favor, debe haber alguna forma!  _ imploró el príncipe.

_ ¡El tiempo es la única forma!_ declaró el hombre sabio.

_ ¿Por qué?_ preguntó angustiado el príncipe.

_ El tiempo se encarga de poner cada cosa en su lugar y da al sufrimiento su verdadero sentido_ explicó el hombre sabio.

_ ¿Por qué debo saber el sentido de mi sufrimiento?_ preguntó nuevamente el príncipe.

_ Porque si sabes el por qué de tu sufrimiento descubrirás la clave para superarlo_ expuso el hombre sabio.

El príncipe descendió de la montaña muy agradecido y caminó por el bosque todo el día. Al llegar la noche se acostó cerca del tronco de un árbol y durmió tranquilo.

Al día siguiente cuando despertó se maravilló al ver el comienzo de la primavera y muchos árboles que habían florecido; pero su felicidad fue mayor cuando vio a un hada recogiendo flores acompañada de un perro el cual no paraba de jugar corriendo detrás de algunos insectos. El príncipe observó el panorama por unos minutos y pensó:

_ La soledad y el rechazo son los motivos de mi sufrimiento. ¡Y estoy viendo la clave para superarlo!

En seguida dio unos pasos hacia adelante y se acercó al hada para conocerla. El hada al verlo le brindó una dulce sonrisa y el príncipe le regaló una hermosa flor. De esta manera se enamoraron y fueron muy felices.

El tiempo le demostró que todo tiene solución y que el sufrimiento siempre se supera.

Autora: María Abreu

Bienaventurados los que lloran, porque ellos recibirán consolación (Mateo 5:4)






← ANTERIOR PROXIMA → INICIO

0 comentarios:

Publicar un comentario

Pon tus comentarios

SUSCRÍBETE

Vistas de página en total

TE GUSTARON LOS CUENTOS?

Sports

Cuentos por categorías

m

Visita feliz